
En verdad no entiendo la obsesión de Paso de los Toros con la SED. Señores publicistas, generalmente no bebemos por esa primitiva razón. Y cuando lo hacemos, ello se debe a que antes hemos realizado alguna clase de esfuerzo físico, como un deporte por ejemplo (¡Gatorade!). Sin embargo, el muchacho del anuncio éste tiene puesta una campera y parece estar bastante relajado, sin rastro alguno de cansancio ni de lógica sed. ¿Quién demonios tiene sed en un día de otoño-invierno, caminando por la calle? Entiendo que la publicidad pretende ser absurda, pero no lo intenta precisamente en esa parte; y eso es lo indignante.
Podemos concluir entonces en que nadie normal toma Paso de los Toros por necesidad -sed- ni tampoco por gusto -ellos mismos admiten que es particularmente horrible, en contraposicion con lo dulce-. Cabe preguntarse, ¿Cómo pueden seguir fabricándola si nadie la consume...? Estimo que su mercado está centrado principalmente en malas personas (villanos, delincuentes, tiranos, asesinos seriales, etc.). Visto así, tiene perfecto sentido imaginar a un ser despreciable disfrutando de una bebida como ésta.
Finalmente, acá pueden ver la infame publicidad:
Aclaración: Todo el texto fue escrito en tono humorístico (aka, no me demanden tiernos lawyers de PepsiCo).
No hay comentarios:
Publicar un comentario